
El mundo se enteró al instante… a través de las redes sociales mayormente. Ningún medio se atrevió a confirmar lo que ya todos sabían: el Rey del pop había muerto.
Yo estaba en clases, cuando lo leí vía Twitter no me pude resistir e interrumpí al profesor (con el riesgo de que me hablara mal por interrumpirle su clase para hacer un “chiste malo”) -Permiso profe, le puedo decir algo… -Ajá, dime. -Se murió Michael Jakson. Todas y el profesor me miraron y se burlaron. Obviamente nadié me creyó. Desviaron el tema, comenzaron a hablar de la muerte de Farah Fawcett y claro, no faltó una despistada que no sabía que el Ángel de Charlie también murió. El profesor se quilló y salió… apuesto a que cuando se enteró de la noticia se dio cuenta de que había menospreciado mis intenciones por darles semejante noticia.
Pero el caso no es mi experiencia, sino la manera en que las redes sociales y los servicios de datos de los celulares se saturaron. Ubertwitter (aplicación de Twitter para BlackBerry) no quería actualizar los tweets, los navegadores ni pa’ alante ni pa’ atrá, sabíamos la noticia pero nos moríamos por saber los detalles.
Según tmz.com, tantas personas acudieron a la Red para averiguar la noticia que Internet prácticamente se cayó. Las principales redes sociales (Facebook, Twitter, MySpace y AIM) no llegaron a caerse pero recibieron tanto tráfico que estaban lentísimas. La última vez que se registraron actividades similares en la Red fue cuando la toma de posesión de Obama.
Una vez más las redes sociales demuestran la magnitud de su poder y lo eficientes que son a la hora de comunicar.
MUERE MICHAEL JACKSON...
Publicado por LoRnYtOoN
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